Cuando Laura (Paz Vega), Gonzalo y el frutero deciden diputar una partida al juego de mesa Scrable. El frutero se revela como un jugador experimentado. Laura y Gonzalo deciden vengarse y darle un escarmiento. Jordi Hurtado ayuda a Gonzalo con una de las palabras de un juego de mesa en el que se disputa su honor. A Vero le da por pensar que nunca podrá ser una buena madre. Gonzalo cree que su hermana se está obsesionando demasiado y le regala un hámster para que ensaye. Cuando el animal aparece muerto, Vero se culpabiliza del fallecimiento. Laura, que volvió al barrio con la intención de lanzarse al mundo empresarial como propietaria de un negocio, se lleva una gran sorpresa cuando descubre que su socia la ha abandonado. Entonces tiene que afrontar la situación y decide seguir adelante con el proyecto a pesar de no ser solvente.